Naufrago I

Estoy perdido desde hace un tiempo en un mar de pensamientos que me han hecho naufragar sin sentido alguno. Después de algún tiempo entre el oleaje y el cielo no he visto más allá de un azul profundo por las noches y la luz del sol que quema mis ojos durante el día.
Estar durante varios días viendo lo mismo debe ser similar a encontrarse perdido en el desierto. A veces uno encuentra oasis imaginarios en forma de barcos o entre sueños se ve la luz de un faro que señala el final del viaje.
Sin embargo llevo desde el martes pasado escuchando gaviotas y el viernes vi la primera entre sueños, no lo creí pero parecía muy real. Ese día el sol bajo de intensidad y a lo lejos empecé a distinguir el horizonte y más tarde me pareció ver un punto muy lejano, pero muy diferente a los barcos que imagine al principio.
Ya casi no tengo provisiones dentro de mi, pero ese punto significa una nueva esperanza para seguir adelante, las ultimas dos noches he sentido en los pies la arena y despierto abruptamente para encontrarme solamente con un sueño que se repite. Sin embargo ayer saque los brazos y reme un poco hacia el punto que no se desvanece, termine agotado, pero terriblemente lleno de ilusiones.
No se si esta sea uno más de los espejismos de los últimos tiempos o si pueda continuar remando con el poco aliento que me queda y algún día llegue a pisar de nuevo la arena. Lo que si sé es que esto es mucho más real de lo que pensaba, me gusta tener una dirección y poder sentir de nuevo por las noches la arena y el sonido de gaviotas que pasan sin que yo las vea.

Imagen: Tom Stillo (allpoters.com)