Por fin hablo, ya puedo estar más tranquilo.

Hoy no me quería despertar porque sabía que los minutos correrían al doble o al triple. Abria los ojos y veia el techo, la lampara de madera y empece a contar todos los pequeños defectos que tenía la pared.

Me volví a tapar la cara con la cobija, no quería esperar tanto tiempo despierto su llamada. sin embargo ya como a eso de la 1:00pm me desperte para enfrentar la realidad de mi día.

Como no tenía mucho que hacer, preparé unos camarones para comer con mi familia y me puse a escuchar musica un buen rato. Efectivamente el tiempo pasaba muy lentamente.

Comí y la sobremesa se me hizo eterna, no escuchaba lo que decían, sino simplemente veia como todos movían la boca y a veces sonreian y yo no entendía nada.

Su llamada llego a las 6:28 de la tarde, ahora me dispongo a salir de mi casa para verla, por fin hablo, ya puedo estar más tranquilo.